viernes, 23 de enero de 2015

EL PROSENCÉFALO (PARTE 2)

Bueno, en esta segunda entrega del prosencéfalo hablaremos de la otra parte que nos quedaba por comentar, el diencéfalo. Recordad que el prosencéfalo estaba compuesto por el telencéfalo (corteza cerebral y núcleos de la base, de los cuales ya hablamos en la primera parte) y por el diencéfalo, del cual empezaré a hablar ahora mismo.

DIENCÉFALO
El diencéfalo es una estructura relativamente pequeña, si la comparamos con otras de mayor tamaño, como la corteza cerebral. Sin embargo, ahora veremos que en este caso no se puede aplicar aquélla regla de "el tamaño importa". Digamos que el diencéfalo es una estructura pequeña, pero matona.

El diencéfalo está formado por una serie de estructuras que cumplen una serie funciones muy diversas para la correcta función del organismo:


- Tálamo: Formado por una serie de núcleos (los cuales no voy a comentar ahora mismo, más tarde dedicaré una entrada exclusivamente al tálamo), cumple una función de filtro de información, es decir, procesa casi todas las conexiones que llegan a él, tanto motoras como sensitivas (salvo la olfatoria), y será el encargado de proyectar la información que recibe hacia otras estructuras encefálicas. De este modo, podemos ver que el tálamo cumple una función muy importante dentro del Sistema Nervioso; de hecho, lesiones en el tálamo pueden producir, desde una una pérdida general de la sensibilidad (anestesia), hasta un coma profundo (es el encargado, junto con la formación reticular, de "encender" la corteza cerebral tras el sueño).


- Hipotálamo: En esta estructura encontramos también una cantidad indecente de núcleos (recordad que los núcleos son agrupaciones de neuronas, y en los cuales se procesa información). Las funciones del hipotálamo son increíblemente amplias. Regula los ciclos circadianos (ciclo de sueño-vigilia), el control hormonal, la actividad sexual, los comportamientos estereotipados sexuales, el apetito y la sed, la temperatura, la organización de la conducta ante determinados estímulos, control del Sistema Nervioso Autónomo (que actúa a nivel de las vísceras)... De este modo podemos ver que el hipotálamo es una estructura importantísima que no se nos puede olvidar encima del piano cuando vayamos a salir por ahí.


- Hipófisis: Es una glándula que está dividida en dos porciones, una que es anterior, es decir, que está por delante (adenohipófisis), y otra que es posterior, es decir, que está por detrás (neurohipófisis); además, está unida al hipotálamo por medio de un tallito, el infundíbulo. De ellas, la que tiene capacidad de producir hormonas es la porción anterior, la adenohipófisis. A la neurohipófisis, por su parte, sólo llegan conexiones de determinados núcleos hipotalámicos (N. Paraventricular y N. Supraóptico), es decir, no tiene capacidad de síntesis hormonal. La adenohipófisis será la encargada de producir hormonas que controlan el crecimiento (Somatotropina, o GH), la glándula tiroides (Tirotropina, o TSH), la producción de células germinales y hormonas sexuales (Gonadotropinas, o LH y FSH), la producción de leche (Prolactina, o PRL) y la producción de hormonas de la glándula suprarrenal (Corticotropina, o ACTH), así como de liberarlas al torrente sanguíneo. La neurohipófisis será la encargada de liberar los productos que se forman los núcleos Paraventricular y Supraóptico del hipotálamo al torrente sanguíneo. Estos productos son las hormonas Oxitocina y ADH (Vasopresina), respectivamente.

En otro momento volveremos a ver todo este embrollo de las hormonas, así como su regulación, de modo que si ahora mismo no se ha quedado muy claro, no os preocupéis, se volverá a explicar.

- Epitálamo: Es una estructura que se localiza encima y por detrás del tálamo. Está compuesta por la glándula pineal y los núcleos habenulares. La función de la glándula pineal consiste en producir melatonina, la llamada hormona del sueño, un nombre que le viene de perlas, pues su función es, cómo no, estimular el estado de sueño profundo, durante el cuál el organismo "carga las pilas". Existe una conexión entre el Núcleo Supraquiasmático del hipotálamo y la glándula pineal, de tal modo que, cuando dicho núcleo recibe estímulos fotosensibles que provienen del quiasma óptico (punto de intersección de los nervios ópticos), se inhibe la producción de melatonina por la glándula pineal, mientras que, en ausencia de ese estímulo, se favorece la producción de melatonina. Es por ello que el sueño se ve más favorecido por la noche, siempre y cuando no tengamos un foco apuntándonos a la cara. La función de los núcleos habenulares está relacionada con el Sistema Límbico, ya que a ellos llegan conexiones de los núcleos septales, en el área septal, cuya función es la de inhibirlo. Esto se traduce en una depresión del nivel de alerta, produciéndose en contrapeso una mejor retención de la memoria y atención selectiva. También están relacionados con el procesado de sensaciones placenteras.

- Subtálamo: Es un complejo nuclear que se localiza por debajo del tálamo, y por detrás del hipotálamo. Consta del Núcleo subtalámico, la Zona incierta y la Sustancia Negra. Bien es cierto que algunas de estas estructuras las vimos en la sección de los núcleos de la base, en "EL PROSENCÉFALO (PARTE 1)", pero también es cierto que en el encéfalo no hay una clasificación única de las estructuras, no hay una separación tan clara como en el aparato locomotor, por ejemplo (un músculo que se une a dos huesos articulados, y al que llega una neurona que lo activa para producir el movimiento de la articulación), sino que podemos encontrar clasificaciones que se rigen a la morfología y a la anatomía exclusivamente, y otras clasificaciones que son, en mi mera opinión, más prácticas, y se rigen a la función, a la fisiología. Y así nos encontramos con la primera trifulca: ¿El núcleo subtalámico y la sustancia negra son estructuras del subtálamo, o de los núcleos de la base? Pues ni uno ni otro, ambas posturas llevan razón, ya que son estructuras que se localizan en el subtálamo, pero que cuya función está relacionada con la de los ganglios basales, de tal modo que es correcto meterlas en cualquiera de las dos clasificaciones. Personalmente, y a efectos prácticos, prefiero incluirlos dentro de los núcleos de la base. Como ya hablamos de estos dos núcleos en la entrada anterior, aquí sólo me centraré en la parte de Zona incierta.
La Zona incierta, como bien dice su nombre, es una estructura de la cual se sabe más bien poco. Se piensa que puede estar relacionada, al igual que los núcleos de la base, con la vía extrapiramidal, es decir, con la regulación del movimiento. No obstante, como no parece intervenir en el circuito que se produce entre los núcleos de la base, tálamo y corteza, no se le incluye por el momento en este grupo (hay que tener en cuenta que estudio del Sistema Nervioso está en constante evolución y avance, y que lo que se puede afirmar ahora mismo, puede ser refutado en un futuro no muy lejano).

Y con esto hemos acabado la parte del prosencéfalo. Tened en cuenta que esta es la parte más amplia, y con diferencia (en todos los sentidos). De las otras dos divisiones del encéfalo (mesencéfalo y rombencéfalo) no me extenderé tanto, ya que están compuestos por estructuras de gran complejidad, y prefiero explicarlas individualmente, y en relación con las funciones que cumplen, pero todo a su debido tiempo, no seáis ansiosos... Por ahora solo me interesa que entendáis lo general del mesencéfalo y el rombencéfalo.

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